José Ángel Calero es el coordinador de LA LÍNEA VERTICAL en Tarragona, donde realiza tanto labores de oficina como trabajos técnicos. También es consultor de ensayos no destructivos y coordinador de estas pruebas en Puertollano, Cartagena y Tarragona. A veces, los trabajos de campo le llevan a desplazarse a otras provincias, pero lo hace sin dejar su función de coordinación en Tarragona.
Empezó a trabajar en LA LÍNEA VERTICAL en el año 2014, buscando la experiencia laboral que necesitaba para poder obtener el certificado del curso de ultrasonidos, y haciendo previamente el curso de técnicas de acceso y posicionamiento por cuerdas de ANETVA. Y este trabajo que comenzó siendo algo transitorio ha acabado convirtiéndose en su medio de vida.
Sus inicios en la empresa fueron en Huelva, donde permaneció varios años, hasta que empezó a participar en proyectos que iban surgiendo en otras provincias. Fue uno de los primeros trabajadores de la compañía que intervino en proyectos en Tarragona, hace tres años, y posteriormente fue nombrado coordinador de la empresa en esta provincia.
Una evolución de la que se siente orgulloso
José Ángel Calero asegura sentirse muy orgulloso de su evolución en LA LÍNEA VERTICAL, ya que entró como ayudante, que es la categoría más baja, y actualmente ocupa un puesto de responsabilidad: “He ido creciendo poco a poco y estoy superorgulloso de llegar hasta donde he llegado, que es la categoría más alta de la empresa después de la dirección. Me ha costado diez años, pero estoy contento porque creo que la mejor manera de crecer es haciéndolo poco a poco, porque así valoras más lo que vas consiguiendo”, manifiesta.
Está muy agradecido por el respaldo que ha encontrado siempre en la dirección de la empresa. “En LA LÍNEA VERTICAL, te apoyan y te ayudan a llegar donde tus capacidades te permitan. Las metas te las pones tú y la empresa no te limita, sino que te ayuda si tienes iniciativa y ganas de mejorar”.
José Ángel Calero considera que una parte muy importante de su crecimiento laboral se la debe a su familia, que siempre le ha apoyado; e incluso cuando ha tenido que desplazarse varios meses por un trabajo y ha coincidido con la época estival, su mujer y sus tres hijos se han ido con él “porque no podemos estar mucho tiempo separados. Cuando estoy dos semanas sin ellos, no estoy bien. Necesitamos estar juntos”.
La seguridad como prioridad
Reconoce que es una persona exigente en el trabajo y busca siempre la excelencia, sin dejar por ello de tener un trato muy cercano con sus compañeros. Asegura que siempre hace todo lo que esté en su mano para que todos estén bien, tanto personal como laboralmente.
Destaca el trabajo en equipo como un aspecto “importantísimo” en las labores que realizan en LA LÍNEA VERTICAL. Cree que es esencial para que un proyecto de gran magnitud pueda salir adelante, y eso es algo que intenta transmitir a su equipo de Tarragona.
Pero para José Ángel Calero, la seguridad está por encima de todo; la considera “una prioridad”. “Yo soy el responsable de la seguridad de mis compañeros y no voy a consentir una mala praxis en trabajos verticales para justificar una producción. La producción no me interesa si se pone en riesgo la seguridad, porque un fallo o una caída puede costar una lesión grave o incluso la vida”. Por eso, afirma con rotundidad que “una persona que no cumpla con las normas de seguridad no es apta para este trabajo”.
Concluye haciendo un balance de los casi dos años que lleva al frente de la Delegación de Tarragona y muestra su satisfacción con la labor que están realizando allí: “Estamos cumpliendo bien nuestro trabajo, obteniendo resultados económicos y de calidad”.