LA LÍNEA VERTICAL patrocina el PROYECTO 8000, que en tres años tiene previsto coronar el Nanga Parbat (2021), el Shishapangma (2022) y el Kangchejunga (2023), las tres cimas que le faltan a Club Alpino Ama Dablam (CAAD) para cerrar el círculo de los 14 ochomiles. Nuestro compañero Enrique Osiel Cárdenas, coordinador del Grupo de Rescate Industrial de LA LÍNEA VERTICAL, será uno de los montañeros que tratará de culminar este extraordinario reto.
El ascenso al Nanga Parbat, en Karakorum (Pakistán), será el primer intento de un ochomil para Enrique Osiel, un sueño que lleva acariciando varios años: “Quiero volver al Himalaya e intentar un ochomil, y no descansaré hasta que lo consiga. Cada mañana me levanto con la ilusión de vivir esas experiencias y eso hace que dé lo mejor de mí. He crecido profesionalmente hasta niveles que nunca imaginé y pienso seguir aprendiendo. LA LÍNEA VERTICAL me ha dado esa oportunidad y espero que podamos continuar juntos por mucho tiempo”.
La expedición al Nanga Parbat, el noveno pico más alto del mundo, en el Himalaya occidental, la componen, junto a Enrique Osiel, los montañeros Manuel González Díaz Lolo –reconocido escalador con más de 34 años de expediciones a sus espaldas–, Sergio Carrascoso Nogales, Ignacio Rodríguez Delgado y Carlos M. Santafé, todos del Club Alpino Ama Dablam de San Pedro de Alcántara (Málaga). El próximo 29 de mayo volarán a Islamabad y comenzarán esta gran aventura que durará 54 días.
Abrir una ruta inédita por el glacial Diama
“Esta expedición es un enorme reto. Son necesarios muchos valores para llevarla a cabo: esfuerzo, dedicación, compañerismo, profesionalidad… Valores que deben estar presentes en nuestro día a día de LA LÍNEA VERTICAL”, afirma Carlos Martín Díaz de Espada, socio fundador de LA LÍNEA VERTICAL.
Y es que Enrique Osiel y sus compañeros de expedición no solo tratan de ascender a la cima del Nanga, como lo denominan los escaladores, una montaña muy aislada y el ochomil más occidental del planeta, en el sector administrado por Pakistán de la región de Cachemira. El objetivo de la expedición es completar la vía de escalada iniciada por Reinhold Messner en el año 2000 a través del glacial Diama, finalizando así la apertura de una ruta inédita.
La expedición andaluza pretende utilizar todas las piezas del actual puzle de rutas e intentos para diseñar un nuevo recorrido, que se podría convertir en la ruta de ascensión más segura de la montaña. La vía Diama no cuenta con ninguna ascensión completada hasta la fecha. Las cordadas para realizar los intentos de ascensión Manuel González Lolo –que es el director técnico de la expedición–, Enrique Osiel y Sergio Carrascoso, los tres escaladores con gran experiencia.
Abrir una ruta inédita por el glacial Diama
El Nanga Parbat fue coronado por primera vez el 3 de julio de 1953 por Hermann Bhul. El 26 de febrero de 2016, Alex Txikon, Simone Moro y Ali Sadpara conseguirían la primera ascensión invernal. Messner ascendió en el año 2000 por primera vez el glaciar Diama, para alcanzar la cima norte (7.816 m). Ferrán Latorre hizo un intento en 2016, alcanzando los 7.500 m. En 2018 Elisabeth Revol y Tomek Mackiewicz completaron una nueva ruta por esta vertiente noroeste en invierno, antes del trágico descenso en el que falleció el alpinista polaco.
Desde LA LÍNEA VERTICAL, como no podría ser de otro modo, apoyamos a nuestro compañero y confiamos en su extraordinario conocimiento y pasión por la escalada. La vinculación de Enrique Osiel con el trabajo en altura y el rescate industrial parte, sin duda, de su pasión por el montañismo. “Empecé a trabajar como Guía de Montaña y técnico de Trabajo en altura y para poder pagarme viajes de escalada y expediciones a grandes montañas –reconoce–. Hace ya casi 25 años de esto y sigo igual que entonces, siempre buscando la manera de poder realizar algún proyecto”. ¡Estamos contigo, Enrique!